Miles de fieles de todo el mundo se congregan en la Basílica de San Pedro para rendir homenaje al Papa Francisco, fallecido el lunes a los 88 años. Su ataúd, custodiado por guardias suizos, permanecerá expuesto hasta el viernes por la tarde, cuando será sellado antes del funeral programado para el sábado a las 10 de la mañana, hora local.
El periodo de duelo público comenzó con el traslado del féretro desde la Capilla de la Casa Santa Marta. El sencillo ataúd de madera fue cargado en procesión por portadores y acompañado por cardenales, obispos, religiosos y la Guardia Suiza, en medio del canto de la Letanía de los Santos y el aroma del incienso. La escena conmovió a los presentes, muchos de los cuales rompieron en llanto al ver pasar el ataúd por la Plaza de San Pedro.
El cardenal Kevin Farrell, actual Camarlengo, encabeza la administración interina del Vaticano. Desde el altar principal de la Basílica, donde el ataúd fue colocado de forma sencilla, Farrell pidió a Dios que acoja al Papa Francisco en la “morada de luz y paz perpetuas”.
La decisión de simplificar el funeral fue del propio Francisco, quien deseaba que se destacara su papel como pastor más que como líder de Estado. En la Basílica, su cuerpo yace con túnicas rojas, mitra episcopal y un rosario entre las manos, tal como mostraron las imágenes difundidas por el Vaticano.
Las exequias del sábado contarán con la presencia de líderes internacionales, entre ellos el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y el presidente de Ucrania, Volodymyr Zelensky. Las autoridades italianas han reforzado la seguridad en torno al Vaticano durante estos días de duelo.
El fallecimiento de Francisco marca el inicio del periodo de “sede vacante” en la Iglesia católica. Los cardenales, reunidos en Roma, preparan el Cónclave que elegirá al nuevo Papa, el cual podría comenzar después del 6 de mayo. Entre los posibles sucesores destacan el filipino Luis Antonio Tagle y el italiano Pietro Parolin.
Francisco, primer Pontífice latinoamericano, será recordado por su humildad, cercanía al pueblo y su firme compromiso con los pobres y el medio ambiente.