Nuevo León continuará experimentando temperaturas elevadas debido a la persistencia de una onda de calor que afecta al territorio mexicano desde hace varios días. A este fenómeno se sumará la presencia de una línea seca que cruzará por el norte del país, lo que traerá consigo otros efectos climáticos significativos para la región.
De acuerdo con el pronóstico extendido del Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de la Conagua, la interacción entre la línea seca, la corriente en chorro subtropical y zonas de divergencia en niveles altos de la atmósfera generará condiciones para vientos fuertes, tolvaneras y lluvias aisladas en la entidad. Se esperan ráfagas de viento de 30 a 40 km/h, e incluso rachas más intensas de hasta 70 km/h en zonas abiertas, acompañadas de posibles tolvaneras en partes de Nuevo León y Tamaulipas.
Además, para este jueves 5 de junio, se pronostican lluvias aisladas (0.1 a 5 mm) en sectores específicos del estado, aunque no se descartan chubascos ocasionales debido a la inestabilidad generada por la línea seca.
Este fenómeno meteorológico —frecuente en el norte del país durante primavera y verano— representa una zona de transición entre masas de aire seco y húmedo. Aunque no siempre produce precipitaciones, su presencia puede detonar tormentas eléctricas, granizadas e incluso tornados en regiones con suficiente inestabilidad atmosférica. En esta ocasión, el SMN advierte sobre la posible formación de torbellinos y tornados en zonas de Chihuahua y Coahuila, aunque para Nuevo León se prevé principalmente viento fuerte y polvo.
La ciudadanía debe mantenerse atenta a los avisos oficiales y tomar precauciones ante las condiciones de calor extremo y fuertes vientos que pueden afectar la visibilidad y la salud.