El periodo vacacional de Semana Santa comenzó de manera trágica en el estado de Nuevo León, con una serie de accidentes automovilísticos que dejaron un saldo de al menos siete personas fallecidas y ocho más gravemente lesionadas en distintos puntos de la entidad. A pesar de las recomendaciones preventivas emitidas por las autoridades el pasado viernes, las carreteras se tiñeron de sangre durante el fin de semana.
La racha de fatalidades inició el sábado en la carretera 57, a la altura del municipio de Doctor Arroyo. En ese lugar, una camioneta que circulaba a exceso de velocidad impactó por alcance a otro vehículo, dejando como saldo una persona muerta y ocho lesionadas, varias de ellas en estado crítico.
Durante la madrugada del domingo, en la carretera a Laredo, frente al Aeropuerto del Norte en el municipio de Apodaca, se registró otro trágico accidente. Un automóvil que regresaba de una fiesta volcó y fue impactado por un tráiler. Tres personas que viajaban en el coche perdieron la vida en el lugar.
Horas más tarde, en el kilómetro 50 de la Autopista a Laredo, en la zona conocida como la Cuesta de Mamulique, dos tráileres protagonizaron un choque que derivó en el incendio total de ambas unidades. Elementos de Protección Civil, al sofocar las llamas, hallaron el cuerpo calcinado de una persona entre los restos.
Otra tragedia ocurrió en la Autopista al Aeropuerto, donde un conductor se estrelló contra un barandal de protección a la altura del Arroyo de la Talaverna, en Apodaca. El impacto fue tan violento que el hombre murió al instante.
Finalmente, en la entrada de la Autopista Monterrey-Saltillo, en San Pedro, un conductor chocó contra el muro central y posteriormente fue embestido por un camión de personal, perdiendo la vida en el sitio.
Las autoridades de Nuevo León han reforzado los operativos viales, advirtiendo que estas vacaciones apenas comienzan y llaman a extremar precauciones.