El derrame industrial proveniente de la empresa Ternium alcanzó un área ecológica del Arroyo La Talaverna en Apodaca, a más de 12 kilómetros de distancia de la planta, generando preocupación ambiental y sanitaria. En la zona afectada, donde el canal pierde su revestimiento de concreto y predomina la vegetación y presencia de aves, se observó una capa rojiza sobre las piedras del lecho y agua con tonalidad grisácea.
Este punto, ubicado cerca del Bulevar Acapulco y la Colonia Acanto Residencial, fue inspeccionado ayer por personal de los laboratorios Intertek Sustainability, quienes recolectaron muestras del agua como parte del análisis requerido por la propia empresa Ternium. Se informó que los análisis preliminares consideran parámetros como pH, conductividad y temperatura, pero el análisis detallado se realizará en Ciudad de México.
El material derramado —que incluye cloruro férrico y ácido clorhídrico— se utiliza para la limpieza de impurezas en el acero, pero representa un grave peligro para el medio ambiente. Especialistas advierten que su presencia en el arroyo podría provocar afectaciones a la infraestructura hidráulica, daños severos a la flora y fauna local, y riesgos para la salud humana, ya que el ácido es altamente corrosivo y puede causar quemaduras.
El derrame afecta tramos de los municipios de Guadalupe, San Nicolás y Apodaca. El pasado 22 de abril, la Comisión Nacional del Agua (Conagua) confirmó una sanción contra Ternium por verter sustancias contaminantes en el arroyo. No obstante, el Gobierno del Estado aún no define qué medida tomará al respecto, a pesar de las crecientes demandas por una respuesta inmediata y transparente.
El caso ha encendido alertas sobre la vigilancia ambiental y el manejo de residuos industriales en zonas urbanas.