Aunque el calendario marca ya el mes de abril, los frentes fríos aún no se despiden completamente del territorio mexicano. El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) informó que un nuevo frente frío se aproxima al país y podría ingresar el próximo jueves 18 de abril, coincidiendo con el Viernes Santo.
Este sistema frontal no será de gran intensidad, como los registrados en invierno, pero sí provocará algunos efectos climatológicos, principalmente en el noreste del país. En particular, se espera un leve descenso en las temperaturas y algunas precipitaciones, así como la presencia de fuertes vientos.
De acuerdo con el pronóstico, durante el viernes y sábado se establecerá una línea seca sobre el estado de Coahuila, en combinación con el ingreso de humedad proveniente del Golfo de México y el Mar Caribe. Esta interacción generará chubascos dispersos en el noreste y sureste del país, afectando a entidades como Nuevo León, Tamaulipas, Durango, Zacatecas, San Luis Potosí, Puebla, Veracruz, Oaxaca y Quintana Roo.
En el caso específico de Nuevo León, se esperan lluvias aisladas, con acumulaciones de entre 0.1 a 5 milímetros, además de viento del sur con velocidades de entre 30 y 40 km/h y rachas que podrían alcanzar los 60 a 80 km/h. Las condiciones ventosas podrían mantenerse durante el fin de semana.
En cuanto a las temperaturas, se prevé un ligero descenso, con máximas que rondarán los 27 grados Celsius y mínimas de hasta 20 grados, lo que ofrecerá un respiro tras los recientes días calurosos.
El SMN recomienda a la población mantenerse informada sobre las condiciones del clima y tomar precauciones, especialmente ante las rachas de viento y los cambios repentinos de temperatura.